Con la llegada del buen tiempo, llega también el momento de enseñar el cuerpo y perder esos kilos de más que hemos ganado durante el invierno, pero hay algo que debemos recordar: es importante llevar una dieta equilibrada y ser conscientes de que los milagros no existen.
Los hábitos alimentarios saludables deben formar parte de una rutina mantenida a lo largo del tiempo y no limitarse a un periodo reducido, pero es ahora cuando más necesitamos recurrir a ellos para lucir una figura estilizada, eso sí, disfrutando del verano.
Con los siguientes consejos, prácticas y alimentos recomendados conseguirás adelgazar sin necesidad de contar calorías:
Una microbiota desequilibrada se relaciona con problemas de obesidad. Estudios científicos y médicos especialistas han demostrado que las personas con sobrepeso tienen una microbiota intestinal más pobre y no tan diversificada como las personas con una microbiota equilibrada y con los mismos hábitos alimenticios y estilos de vida. Por ello, el equilibrio de la microbiota intestinal refuerza la pérdida de peso y reduce las posibilidades de volver a recuperarlo.
Para conseguir una microbiota sana y reforzar la pérdida de peso, no te olvides de incluir en tu dieta alimentos ricos en:
Cuando las temperaturas comienzan a subir el organismo demanda hidratación, pues a través del sudor se pierden toxinas, pero también una importante cantidad de agua y sales que debes reponer. Además del agua pura, los caldos, infusiones y zumos de fruta fresca no pueden faltar en tus menús veraniegos, te mantendrán perfectamente hidratada y aportarán además una dosis extra de vitaminas, minerales y antioxidantes.
Apúntate a las refrescantes ensaladas de hortalizas frescas y a la fruta, contienen alrededor del 90% de agua en su composición y aportan muy pocas calorías.
Aprovecha el buen tiempo para practicar deportes al aire libre (correr, nadar, jugar al voleibol, etc.) o simplemente pasear por la playa. Harás ejercicio y quemarás calorías sin darte cuenta. En lugar de sentarte horas y horas en la hamaca junto a la playa, zambúllete en el agua o juega a las palas en la orilla del mar, te refrescarás y te pondrás mucho más morena, a la par que disfrutas, tonificas la musculatura y quemas calorías.
Las actividades de aventura nos ayudan a descargar adrenalina, vivir nuevas sensaciones y también perder peso. Las acuáticas son las preferidas, apúntate a surf, practica submarinismo, haz clases de aquaeróbic... y verás los resultados, además de pasar una jornada muy divertida.
Por la tarde, disfruta de largos paseos. Ya sea un tu lugar de vacaciones habitual o visitando una ciudad, deja de lado el autobús y el metro, y admira nuevos lugares andando, quemarás calorías rápidamente. Cualquier actividad que mantenga el cuerpo en movimiento te ayudará a estar en forma y a mantener las calorías a raya.