El invierno se aproxima, las temperaturas comienzan a bajar y nuestro sistema inmune necesita reforzarse para evitar problemas de salud. Para evitarlo, es clave conocer los mejores alimentos contra gripes y resfriados, los cuales nos ayudarán a afrontar el invierno en plena forma. Entre ellos se encuentra la manzana, una fruta plagada de antioxidantes, vitaminas y fibra, fundamentales para sobrellevar los desajustes del cuerpo típicos de los meses más fríos.
Cabe resaltar que la ingesta de alimentos ricos en antioxidantes fortalece el sistema inmune y previene la aparición de signos propios del envejecimiento, ya que los antioxidantes neutralizan los radicales libres que atacan el organismo y aceleran el desgaste celular.
Las extraordinarias cualidades dietéticas que se le atribuyen a la manzana se deben en gran medida a los elementos fitoquímicos que contiene, entre ellos, polifenoles (flavonoides y quercitina), con propiedades antioxidantes, especialmente en su piel. Además, la piel de manzana es rica en ácido ursólico, una sustancia que reduce el riesgo de obesidad y ayuda a quemar calorías. También en la piel se localiza la pectina, una fibra hidrosoluble que favorece el tránsito intestinal, evitando el estreñimiento, ralentiza la absorción de azúcares refinados y grasas, además de tener un efecto saciante.
Llevar una alimentación equilibrada y saludable, con cinco ingestas al día, incluyendo media mañana y merienda, son esenciales para evitar llegar con hambre voraz a las comidas principales. Si el cuerpo reclama picar algo entre comida y comida debes escucharle, eso sí, eligiendo tentempiés sanos, bajos en grasa y que no aporten muchas calorías, es aquí donde entra la fruta estrella: la manzana.
Por su facilidad de transporte, la manzana es el comodín perfecto para llevar en el bolso al trabajo, listo para el momento que asalte el hambre. Lo mejor es consumirla directamente con la piel, que además de potenciar el sabor actúa como cepillo de dientes natural (ideal también para fortalecer las encías), y es donde se encuentra su mayor aporte de pectina, una fibra con efecto saciante que ayuda a disminuir la sensación de hambre durante más tiempo. También favorece el equilibrio intestinal de forma suave y eficaz, combatiendo el estreñimiento cuando se consume cruda y con piel, mientras que es capaz de solventar procesos diarreicos cuando se toma cocida y sin piel.
Por si fuera poco, la manzana es muy baja en calorías, no posee grasas y aporta una moderada concentración de potasio que te ayuda a prevenir la hinchazón y la temida retención de líquidos.
Las manzanas son una de las frutas más conocidas y que más ventajas poseen a la hora de perder peso. Según un estudio presentado en la Conferencia sobre Biología Experimental de los Estados Unidos, las personas que consumen manzanas de modo habitual están más sanas. Los científicos descubrieron que las personas que consumen esta fruta regularmente presentan un 27% menos de posibilidades de desarrollar el síndrome metabólico y un 36% menos de padecer hipertensión. Se debe a que generalmente aquellas personas que comen manzanas suelen prestar más atención a su dieta y además llevan un estilo de vida más sano. Los médicos han demostrado que "las mujeres que ingirieron una pieza al día perdieron una media de casi 1.500 gramos".
También, los antioxidantes que se encuentran en esta fruta "mejoran el nivel de metabolismo de los lípidos y reducen la producción de moléculas inflamatorias relacionadas con el riesgo cardíaco". Y es que, en el colesterol es casi milagrosa. Los expertos que realizaron el estudio, de la Universidad de Florida, advirtieron los "cambios increíbles que se producen en los niveles de colesterol a los seis meses de consumir una manzana al día".
Además, esta fruta es la reina de la relajación y la fruta ideal para consumir en diferentes preparaciones para ayudarnos a aliviar el estrés y conciliar el sueño. Por su contenido en vitamina B12, B6 y potasio sirve para combatir el insomnio y ayuda a relajar al cuerpo. Y si aprovechamos mientras comemos una manzana para ponernos una alguna canción relajante tendremos la combinación perfecta para lograr un sueño reparador.
Sin duda, por sus múltiples nutrientes y vitaminas, saborear una jugosa manzana entre horas es la forma más saludable de alejar el hambre y mantener los kilos a raya. Si quieres saber más, descubre aquí la información nutricional de la manzana.
Por todo lo anterior, consumir una manzana al día durante el invierno es una saludable costumbre que debes poner en práctica. Para ayudarte a conseguirlo de la forma más sencilla y sabrosa, Kanzi nos propone una receta para un almuerzo o tentempié que hará las delicias de toda la familia. Un snack fácil y rápido para llevar a la oficina, y sobre todo, muy saludable.
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