No va ligada necesariamente a la obesidad o al sobrepeso. La celulitis se produce cuando el tejido adiposo acumula un exceso de lípidos y otras sustancias en determinadas zonas del cuerpo, especialmente muslos, caderas, glúteos y abdomen. Es el aumento del tamaño de las células grasas (adipocitos), que no "dan salida" a la grasa acumulada, lo que provoca la temida piel de naranja, algo que no sólo es un problema estético sino un síntoma de posibles anomalías en el sistema circulatorio y linfático.
Sus causas son muy diversas, desde los factores genéticos hasta el estrés, aunque no hay duda que la vida sedentaria y una alimentación desequilibrada contribuyen a su aparición.
Combatirla no es sencillo y requiere paciencia y determinación. Cremas, masajes y ejercicios específicos pueden ayudar a su desaparición en los casos más leves (celulitis blanda), a mejorar notablemente su aspecto en el caso de cúmulos grasos persistentes, e incluso a aliviar las molestias (y dolor) que produce la celulitis edematosa. Pero también, muchas plantas a nuestro alcance y utilizadas desde la antigüedad poseen magníficas propiedades para combatir este problema, íntimamente ligado a la presencia excesiva de sustancias nocivas en nuestro organismo.
En forma de infusiones o a través de sencillos tratamientos naturales de fitoterapia, como masaje con aceites esenciales o compresas hechas con determinadas hojas, las plantas son una alternativa o un complemento perfecto y eficaz para luchar contra los distintos tipos de celulitis. Puedes encontrarlas fácilmente en tiendas de dietética y herbolarios, incluso ya preparadas en bolsitas de infusión. Atendiendo a sus propiedades, las que más te pueden ayudar son:
Gtres
Siempre rodeada de cierto aire "mágico" y misterioso, esta humilde planta tiene un extraordinario efecto diurético. Es rica en inulina y en potasio, por lo que resulta eficaz como pocas para evitar la retención de líquidos. Es perfecta para eliminar toxinas y para ayudar al hígado a metabolizar las grasas de manera que éstas no se acumulen en el organismo. Prueba a hervir 100 gr. de raíz y/o hojas en 1 litro de agua, 15 minutos y deja reposar la infusión. Puedes tomar dos tazas al día.
Su alto contenido en minerales la convierte en un reconstituyente natural que revitaliza todo el organismo. Es especialmente rica en magnesio lo que le confiere un poder drenante capaz de mejorar notablemente el sistema linfático. Puedes preparar una infusión añadiendo en una taza de agua hirviendo una cucharadita de hojas secas (deja reposar cinco minutos).
Es una de las más conocidas y valoradas por su riqueza en sales minerales y flavonoides. Resulta especialmente efectiva cuando la celulitis va unida al problema de retención de líquidos, dado que es un magnífico diurético. Además, contribuye a facilitar la digestión y a eliminar toxinas. Tienes distintos preparados que incluyen en su composición cola de caballo y, si lo prefieres, puedes preparar tu propia infusión añadiendo una cucharada pequeña de sus hojas en una taza de agua hirviendo (reposar 15 minutos).
Utilizada desde hace siglos en distintos tratamientos (afecciones respiratorias), en la actualidad se conoce, además, su capacidad para favorecer el drenaje vascular y linfático. Contiene hederagenina, elemento que actúa en los vasos sanguíneos produciendo una constricción y posterior dilatación. Este "ejercicio" de los vasos es lo que hace que mejore la circulación. Dada su toxicidad, su uso es externo.
Puedes encontrar numerosas cremas anticelulíticas que la incluyen en su composición. También puedes elaborar tu propio producto casero, diluyendo una cucharada de hojas secas en una taza de aceite de oliva. Deja que macere 10-12 horas y luego podrás aplicar la mezcla, con ayuda de una toalla o un guante, en la zona afectada por la celulitis.
Otra idea es diluir una cucharadita de hojas secas machacadas en el mortero en agua caliente y, a continuación, añadir la mezcla al agua de la bañera. Activarás así la circulación de todo tu cuerpo.
Más conocida como Reina de los Prados, es una planta rica en salicicatos, lo que le confiere un importante poder antiinflamatorio, y en flavonoides antioxidantes. Muy apropiada en caso de celulitis edematosa y para favorecer la correcta eliminación de líquidos retenidos.
Su uso tópico en forma de lociones, cremas o jabones contribuye a mejorar la microcirculación de la zona de aplicación, ejerciendo, además una importante actividad antiinflamatoria. Esta planta también se utiliza en numerosos tratamientos cutáneos por su capacidad para estimular la regeneración de la piel.
Muy utilizado como condimento, tal vez no sepas que el tomillo es un excelente regulador de la circulación sanguínea que también posee propiedades ligeramente sedantes. Estas dos cualidades lo convierten en un buen aliado contra la celulitis, bien en forma de infusiones o a través de masajes realizados con su aceite esencial.
Un excelente remedio contra la celulitis consiste en mezclar una taza de aceite de oliva o almendras con 1/2 zumo de pomelo y 2 cucharadas de tomillo seco. Aplica la mezcla con un masaje haciendo círculos. Para intensificar el efecto, envuelve las piernas con papel film transparente. Puedes hacerlo una vez a la semana.
Las propiedades antiinflamatorias del Castaño de Indias son notables, capaces de prevenir la formación de varices y reducir la inflamación si ya se han formado, es por ello que la industria farmacéutica y cosmética añade los principios activos de esta planta a numerosas cremas y lociones. Reduce la pesadez en las piernas, evita los edemas y la retención de líquidos en las mismas. Debido a su beneficioso efecto sobre la circulación, ayuda a combatir la celulitis. Prepara tu remedio anticelulítico casero con Castaño de Indias:
La Reina de los prados es una planta conocida por sus propiedades terapéuticas desde la antigüedad. Sus beneficios residen en el contenido en flavonoides y derivados salicilados, ejerciendo una doble actividad. Por una parte ejerce una actividad analgésica/antiinflamatoria, por otro, depurativa, siendo muy eficaz en el tratamiento de la retención de líquidos asociada a celulitis.
Dadas sus propiedades diuréticas, antiinflamatorias y desinfiltrantes, se recomienda en casos de celulitis dolorosa y edemas en las extremidades.
En farmacias y parafarmacias encontrarás cápsulas con polvo criomolido de la planta, procedimiento que asegura una mayor liberación de sustancias activas y una mejor asimilación por parte del organismo.
Siempre rodeada de cierto aire “mágico” y misterioso, esta humilde planta tiene un extraordinario efecto diurético. Es rica en inulina y en potasio, por lo que resulta eficaz como pocas para evitar la retención de líquidos.
Resulta especialmente efectiva cuando la celulitis va unida al problema de retención de líquidos, dado que es un magnífico diurético. Además, contribuye a facilitar la digestión y a eliminar toxinas.
Su alto contenido en minerales la convierte en un reconstituyente natural que revitaliza todo el organismo. Es especialmente rica en magnesio lo que le confiere un poder drenante capaz de mejorar notablemente el sistema linfático.
Contiene hederagenina, elemento que actúa en los vasos sanguíneos produciendo una constricción y posterior dilatación. Este “ejercicio” de los vasos es lo que hace que mejore la circulación. Dada su toxicidad, su uso es externo.
El tomillo es un excelente regulador de la circulación sanguínea que también posee propiedades ligeramente sedantes. Estas dos cualidades lo convierten en un buen aliado contra la celulitis, bien en forma de infusiones o a través de masajes realizados con su aceite esencial.
