Agrega al esmalte de uñas trocitos de ajo picados y guárdalo en la nevera. Cada semana debes aplicar el esmalte en las uñas.
Basta con sumergir tus manos a diario durante 5 minutos en una mezcla de pulpa de aguacate madura junto con el zumo de un limón. Antes de lavarte las manos empuja la cutícula hacia atrás sin cortarla.
Has de mezclar una cucharadita de zumo de limón y una cucharadita de yodo blanco. Aplícatelo sobre las uñas con ayuda de un cepillo pequeño dos veces al día (mañana y noche).
Nutre y endurece tus uñas sumergiéndolas durante 15 minutos en aceite de oliva tibio, posteriormente acláralas con abundante agua, sécalas y aplica el esmalte. Repite la operación 1 vez por semana.
Para fortalecer las uñas, sumerge tus dedos en vinagre de sidra 1 vez por semana.
Introduce las uñas en el zumo de dos limones durante 15-20 minutos. También puedes frotarlas con un trozo de limón.
En caso de amarilleo persistente de las uñas, también puedes frotar sobre ellas un poquito de pasta dentífrica blanqueadora.
Es muy importante protegerlas con guantes siempre que laves la vajilla o la ropa, y olvídate de pintarlas o limarlas una temporada. Además, todas las noches sumérgelas en aceite de oliva tibio.
Si tienes algún molesto "padrastro" en los costados de tus uñas, aplica sobre él una capa de esmalte transparente para evitar que al rozarte con la ropa se enganche y duela. Cuando el esmalte se caiga por sí solo, los padrastros habrán desaparecido.
Necesitas:
Agrega todos los ingredientes en el brillo de uñas (esmalte) y déjalo reposar durante 2 semanas.
Transcurrido ese tiempo agita bien el esmalte y aplica 1 capa diaria durante 15 días consecutivos hasta completar 15 capas.
El día 16 retira todos los esmaltes de las uñas con quitaesmalte y al día siguiente repite la misma operación hasta que el hongo haya desaparecido.
Ficha estos 5 sencillos consejos que nos ofrece Laura López, experta en nutricosmética: